Por Martín Díaz / La Nube
Eduardo Gattas, alcalde de Ciudad Victoria, acusado de asociación delictuosa, lavado de dinero y fraude fiscal según la UIFA, acusaciones que aún están vigentes, se prepara ahora para encabezar la «impartición de justicia comunitaria» en la ciudad donde cobra como Presidente Municipal.
Eduardo Gattas Báez anunció la creación de tres centros de mediación llamados «Guardianes de la Paz», que tienen como objetivo la impartición de justicia comunitaria, según lo dio a conocer el boletín oficial de la página del Municipio.
La ciudad de Victoria ha venido padeciendo de malos gobernantes desde hace algún tiempo. Cuando parece que queda atrás la pesadilla de un mal gobierno, llega uno nuevo y lo supera, y la administración que el actual Alcalde encabeza no podía ser la excepción.
Problemas de basura, de calles en muy mal estado, de inseguridad, alumbrado público, fugas de drenaje, entre muchos otros, son los que han convertido a la antes ciudad bonita en lo que tenemos ahora: una ciudad con muchas carencias, donde gobierna un Alcalde que se queja mucho pero trabaja poco.
La colaboración entre los distintos órdenes de gobierno siempre será bienvenida, pero cuando no cumple con lo que como autoridad le corresponde, difícilmente aportará algo positivo en bien de otras instituciones.
Los problemas están a la vista y parecen no tener pronta solución. El responsable de dirigir los destinos del Municipio está más preocupado por buscar la reelección, que asegura ya tiene en la bolsa, que en intentar terminar su pésima administración de manera digna.
Con los antecedentes personales del Alcalde, poco podemos esperar de la llamada «impartición de la justicia comunitaria»; es como «poner al zorro a cuidar el gallinero». Que deje de distraerse en cosas que no le corresponden y que desquite el sueldo que recibe como Alcalde.